Estados Unidos le quitó el trono de la Copa Oro a México con gol al final del tiempo extra

Estados Unidos completó una Copa Oro perfecta y de la mejor manera posible: venciendo a México, su clásico rival, con un gol sobre el final del tiempo extra (1-0) para coronarse como nuevo campeón de la principal competición de Concacaf.

En Las Vegas, la selección de las barras y las estrellas impuso su juego efectivo, que prioriza los resultados a la vistosidad, y tuvo su recompensa aún cuando se presentó en la competencia con un conjunto alternativo.

Por su parte, México no le hizo honor a una escuadra bastante experimentada y con jugadores de primer nivel en el continente e incluso en Europa. Además, no sacó provecho de la nacionalización de Rogelio Funes Mori, quien no pudo marcar en los últimos dos encuentros.

Fue un partido de muchos fallos, aunque la primera ocasión de peligro fue generada por un cabezazo casi letal de Rogelio Funes Mori, el cual fue detenido por el arquero Matt Turner.

El partido prometía emociones, y nos regalaría muchas jugadas más para levantarnos del asiento.

Luego de la salvada estadounidense vimos el primer gran error en su definición. Paul Arriola no pudo aprovechar una salida ineficaz de la zaga mexicana y perdonó un mano a mano prácticamente inmejorable.

La estrategia le funcionó de maravilla a Estados Unidos, que presentó a un equipo alternativo plagado de jóvenes y de jugadores de la MLS en búsqueda de confeccionar a la mejor plantilla posible para el inicio de las Eliminatorias de Concacaf rumbo a Qatar 2022.

En el camino no solo se encontraron con el apoyo de sus fanáticos, sino también con una defensa capaz de soportar los embates de cada uno de los rivales a los cuales enfrentó. Supo sufrir y también supo ganar: se marcha de la Copa Oro con seis triunfos, 11 goles a favor y apenas uno en contra.

Los dirigidos por Gregg Berhalter sonríen más que nadie en la región al terminar los compromisos de verano con dos trofeos: la Concacaf Nations League y la Copa Oro, ambos ganados a México, que día a día ve cómo Estados Unidos le pisa los talones, incluso con una selección alternativa.