Continúan los trabajos para mantener dos rondas de Fórmula 1 en Italia, tanto en el aspecto contractual como en el de la modernización de las instalaciones. Tanto en Monza como en Imola, las dos rondas que figuran actualmente en el calendario, se está trabajando en la mejora de los autódromos, una de las condiciones fijadas por Stefano Domenicali, CEO de la F1, para continuar en el futuro.
El circuito de Monza es una de esas citas definidas como «históricas», dada su larga presencia en el mundial, pero no por ello se da por hecho el futuro.
Los máximos responsables de la máxima categoría no han ocultado su deseo de que trazados como Monza, Silverstone o Spa-Francorchamps sigan siendo un pilar del calendario, pero no sin las intervenciones necesarias para mejorar las instalaciones y alcanzar el nivel que imponen otros autódromos.
Por ello, tanto en Monza como en Imola se han iniciado una serie de obras para estar a la altura de los tiempos y las exigencias de la F1. En lo que respecta al primero, las intervenciones prevén la construcción de nuevos cruces subterráneos y caminos adicionales para facilitar el flujo de público, así como un reasfaltado de la pista con materiales de última generación y la disposición de los bordillos.
Además, también habría recursos suficientes para realizar una parte de la nueva cubierta de boxes y, en el futuro, construir nuevas tribunas que sustituyan a las desmontables para dar una imagen moderna y ofrecer nuevos servicios al público. Angelo Sticchi Damiani, Presidente del ACI (Automóvil Club Italiano), confía en que parte de estas obras puedan completarse a tiempo para la carrera del año que viene.
Stefano Domenicali, Angelo Sticchi Damiani, Gian Carlo Minardi y otros trabajaron para salvar los dos GP de Italia.
Sin embargo, las negociaciones con Liberty Media para renovar el contrato que expira en 2025 también continúan en paralelo. En una entrevista exclusiva con La Gazzetta dello Sport, Sticchi Damiani confirmó que ya existe un acuerdo para firmar un nuevo contrato que prevé la confirmación de ambos eventos italianos por otros cinco años, por lo tanto hasta 2030.
La idea es poner la firma antes de finales de 2024, para anticiparse al calendario y vencer a la competencia de otros países dispuestos a albergar un Gran Premio.
«Nos gustaría firmar un precontrato antes de finales de 2024. En el caso de Imola, la situación es más clara, porque la Región de Emilia-Romagna, el Ayuntamiento y Con.ami se han comprometido a concluir en primavera la modernización de las instalaciones, que incluye el techado de los boxes y la nueva estructura del Paddock Club, con un retorno positivo para todos. En el caso de Monza, existe la limitación naturalista ligada al hecho de que el circuito se encuentra dentro de una zona verde, por lo que es necesario poder renovar el acuerdo con el Consorzio del Parco, que expira a finales de 2028», explicó el Presidente de la ACI en la entrevista concedida al diario.
«Es importante anticipar el calendario con respecto a la fecha límite de 2025, que coincidirá con la elección del presidente de la FIA y la redacción del nuevo pacto de Concordia entre los equipos y la F1. También porque, a nivel internacional, hay cola de peticiones para albergar un GP, basta pensar que Francia y Alemania no tienen ninguna, así que es mejor asegurar nuestras carreras hasta 2030».