Con motivo del Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz, el Papa Francisco abogó por la creación de una disciplina deportiva que promueva la fraternidad social y no se enfoque solo en las victorias y las ganancias monetarias.
La autoridad religiosa señaló que, para desarrollar una disciplina deportiva con dichas características, se necesitan dirigentes y formadores enfocados en una educación que enarbole la amistad social y la fraternidad.
“Todos sabemos en qué medida practicar el deporte pueda educar una sociedad abierta, solidaria y sin prejuicios, pero para eso hacen falta dirigentes y formadores que no apunten solo a la victoria o a las ganancias (…) Es necesario promover un deporte que favorezca la amistad social y la fraternidad”, destacó.
El placer y el poder
En medio de su discurso, desde la ventana del Palacio Apostólico, tras el ‘Regina Coeli’ que sustituye al Ángelus en tiempo pascual, el pontífice argentino había reflexionado sobre la idea materialista del éxito en la vida, advirtiendo que la felicidad no se encuentra siguiendo “las vías del placer y del poder”.
“Todos queremos tener vida pero existen diversos puntos de vista sobre cómo lograrlo. Por ejemplo, hay quien reduce la existencia a una carrera frenética para gozar y poseer muchas cosas: comer y beber, divertirse, acumular dinero y objetos, sentir emociones fuertes y nuevas”, sostuvo.
Asimismo, el Papa agregó que la vida llena de deseos y ambiciones “a primera vista parece atractivo pero que no sacia el corazón” del hombre.
“No es así como se ‘tiene vida’, porque siguiendo los caminos del placer y del poder no se encuentra la felicidad. De hecho, quedan sin respuesta muchos aspectos de la existencia como por ejemplo, el amor, las experiencias inevitables del dolor, las limitaciones y la muerte. Y, además, no se hace realidad el sueño que todos tenemos en común: la esperanza de vivir para siempre, de ser amados sin fin”, puntualizó.